Las pruebas genómicas (también conocidas como pruebas multigénicas) analizan una muestra del tumor del cáncer para analizar el nivel de actividad de determinados genes, el cual afecta el comportamiento del cáncer, incluyendo su probabilidad de crecimiento y propagación. Una de estas pruebas genómicas en particular proporciona, además, una estimación del beneficio de la quimioterapia. Se usan para ayudar en la toma de decisiones sobre tratamiento después de la cirugía.
En el caso del cáncer de mama puede ayudar a determinar la agresividad de un tumor o la probabilidad que un determinado tratamiento mejore el resultado, permitiendo escoger el plan de cuidado adecuado para el paciente.